En pasados días de noviembre, en la escuela los alumnos desarrollaron sus habilidades poéticas y escribieron a sus compañeros y maestros bellas composiciones tradicionales con relación a el día de muertos.
Ellos con gusto hicieron mofa a sus compañeros tratando de contagiarnos de la picardia de la adolescencia, con el acompañamiento de la famosa "Catrina" dibujo de Guadalupe Posadas, como muestra de que el mexicano no le teme a la misma muerte.
Las profesoras de apoyo también se contagiaron al realizar la ofrenda para el que en vida fuera el dueño del terreno en que se encuentra ubicada la escuela, el señor Don Esteban Ángel Vazquez. Esta amable persona dono el terreno para la escuela y hoy se le recuerda mucho al poner la ofrenda en su nombre.
Ahora tambien nosotros disfrutemos de festividades que enriquecen nuestras tradiciones, y tan orgullosamente mexicanas como estas sabrosas frutas.